Overkill - The Grinding Wheel
Estados Unidos
Editado el 17 de Febrero de 2017
Nuclear Blast
Estilo: Thrash Metal
Nuclear Blast
Estilo: Thrash Metal
Uno de los exponentes del Thrash Metal de toda la vida, los norteamericanos OVERKILL vuelven a la carga con el sempiterno Bobby "Blitz" Ellsworth a las riendas. Aún siendo un pilar fundamental en este estilo de música con décadas de trabajo a sus espaldas, casi siempre y de forma injusta han
estado a la sombra de las grandes "figuras famosas". Y digo injusta porque esta banda ha sido fiel a sus principios y siempre de un modo veraz y contundente. Algo parecido les ocurre a los geniales Exodus, grupos que tienen una calidad sobresaliente pero que parecen no llegar a las cotas de reconocimiento de primera línea.
No creo que tampoco este hecho concreto haya supuesto para ellos una merma en su condición como banda a la hora de presentar obras maestras en esto del Thrash. Su estilo personal e inconfundible ha dejado huella en todos nosotros y es que estamos hablando de una formación longeva formada en 1980 y desde 1985 publicando discos con una identidad propia dejando una impronta indeleble. Cuando uno pone cualquier álbum de estos Thrashers, ya sabes de forma inmediata de quienes se tratan. Todo ello se ha conseguido con obras maestras como "Horroscope" o sin ir más lejos, sus primeros discos.
Como todo en la vida Overkill ha pasado por altibajos pero insisto, manteniendo año tras año su línea musical que apenas ha sufrido merma alguna. Cada dos años aproximadamente tenemos nuevo disco que saborear para deleitarnos en esto del Thrash y aunque en los últimos años no hayan sorprendido de forma exponencial al personal, sí que han sabido aguantar el empuje de bandas noveles que vienen pegando fuerte.
Llevábamos tres años de sequía Overkill y esta vez puedo decir bien alto que la espera ha merecido la pena. A principios de 2017 publican este gran "The Grinding Wheel" que es todo un trallazo o un bofetón en la jeta bien dado para dejar bien claro cómo se ha de tocar el Thrash Metal en pleno siglo XXI. En este álbum se destila un grado mayor de agresividad y el sonido nostálgico de los ochenta y principios de los noventa vuelve a estar patente con todas las de la ley. El concepto del mismo es de mayor densidad en donde las canciones son mucho más completas y desprenden una fuerza que hacía ya unos cuantos años no denotaba en ellos. Son un total de diez temas (uno más en la edición limitada) bien complementados entre sí que desprenden robustez por los cuatro costados y en donde la tralla ha subido algunos enteros, un regreso en cierta manera a tiempos pretéritos.
Lo del bajo de D.D. Verni en esta banda es algo que siempre me ha parecido admirable con una presencia muy reseñable en todos sus trabajos pero en este "The Grinding Wheel" parece despuntar más si cabe. Ese sonido tan típico de ellos es perceptible en todo momento sin perder un grado de energía. La verdad es que la formación actual que lleva manteniéndose desde 2005 se encuentra más pletórica que nunca a todos los niveles.
Empezamos con la batería y ese sonido de bajo y baterías arreciando tus oídos en MEN, GREEN, KILLING MACHINE preparándote para un ritmo muy potente que ya deja las cosas claras. Aquí están Overkill al 100% con esas estrofas cabalgando al ritmo de esa voz inconfundible de Bobby "Blitz" Ellsworth que se va tornando más agresiva. Imponente estribillo en una pieza muy en la onda de sus temas clásicos. Pero donde la furia se va a desatar es en GODDAMN TROUBLE en un trallazo Thrash Metal marca de la casa, rápida y directa a reventarte la cabeza. Aquí Bobby "Blitz" Ellsworth parece cantar con más mala leche que nunca en una composición fabulosa que recoge todos los elementos de los norteamericanos. El sonido de las guitarras tiene mucho cuerpo y la celeridad está presente en todo momento ofreciendo a mayores unos cambios de ritmo contundentes. Durante el solo de Dave Linsk la situación se torna un poco más tranquila y pausada.
Avalancha de sonidos y rápido la batería inicia una cadencia imparable en OUR FINEST HOUR sustentando el mismo nivel de caña que la precedente canción. Durante las estrofas Bobby quiere desgarrarse las cuerdas vocales subiendo su intensidad por momentos para pasar a un estribillo muy asumible y que me ha recordado a trabajos de principios de la década de los 2000. Llegados al preámbulo del solo todo se torna más interesante si cabe con unos geniales cambios de ritmo rescatando cierto grado de nostalgia por tiempos pretéritos; temazo. Aplastante en su entrada es SHINE ON que posee un ritmo machacón cambiando de registro cada poco y que no podrás quitarte de la cabeza, es la típica canción de directo para que todo el mundo bote sin parar. La antesala de los estribillos es pura remembranza de los ochenta sonando hodierna como si el tiempo no hubiera pasado.
Redobles de batería y cabalgada épica entonando un coro sencillo pero efectivo en el preludio de THE LONG ROAD para afrontar otro cañonazo de tema con fuerza. Durante las estrofas la marcha vocal de Bobby se desquicia por momentos y no se consigue perder un ápice de velocidad. Terminadas éstas la composición nos ofrece divergentes grados de intensidad con un solo de guitarra más intrincado y extenso que dará lugar a unas magníficas melodías de guitarra para encarar el tramo final de esta canción más novedosa. Ritmos pesados y densos en LET'S ALL GO TO THE HADES con el bajo de D.D. Verni marcando las diferencias. A posteriori el tema va arrancando hacia términos mas similares que se asemejan o tienen más puntos de conexión con sus últimas obras. La entonación vocal de Bobby aquí es diferente lo cual le confiere un aspecto más específico. Una canción que se sale un poco de la tónica general escuchada hasta ahora.
COME HEAVY se inicia de forma sinuosa imponiendo un ritmo constante con unas estupendas melodías de guitarra muy bien encajadas que darán puerta libre para que un ritmo Heavy transformado bajo el prisma de Overkill puedan convertir esta canción en un single en potencia. Todo ello se rompe con la llegada del solo que acelera esta pieza musical unos cuantos grados más. Como ya he dicho, su tema más Heavy del álbum. Que nadie se relaje porque el trallazo de RED WHITE AND BLUE no dejará indiferente a nadie. Se han cabreado de verdad y la velocidad unido al espíritu Thrash Metal más puro se elevan por doquier. La mala leche constante a lo largo de estos cinco minutos es un referente que contrasta con los cambios de cadencia que quedan perfectamente encajados en la estructura de la pieza inclusive con coros que responden a Bobby. Muy típica en ellos pero de gran efectivad, tema interesante del disco.
Regresamos al panorama de los noventa con THE WHEEL que también tiene en sus entrañas el sabor de la vieja escuela Thrash con imponentes subidas de ritmo que aceleran y deceleran en cuestión de segundos. Una obra que tiene prestancia y que suena fresca en todo momento permitiendo al oyente prestar atención en todo momento. Cañero solo de guitarra en un último fragmento más vehemente si cabe con partes instrumentales muy bien intercaladas. De lo más variado y reseñable que hay en el álbum. Es hora de cerrar este gran trabajo con un broche de oro bien merecido en la propia THE GRINDING WHEEL. Redobles de batería marcando el paso inexorable hacia un ritmo que como por ensalmo se torna más denso sin recurrir al trallazo típico... de momento. Bobby "Blitz" Ellsworth canta de nuevo con más ahínco variando mucho sus tonalidades vocales, gritos incluidos. Y sí, la segunda parte de la canción es puro fuego con un drástico cambio de ritmo que acelera el tema con una velocidad Thrash encomiable. El bajo se queda solo para afrontar la recta final que nos introduce de lleno en un entorno épico como nunca había escuchado antes en los norteamericanos; ¡qué pasada de tema!.
OVERKILL no necesitan inventar nada nuevo ni tampoco estamos ante su mejor disco o una obra maestra pero sí uno de los más destacados en los últimos años. Siguen sonando frescos como desde el primer día y eso es un valor a tener en cuenta. Lo que sí es cierto es que han aportado un cierto grado de pasión a toda esta obra que la hace más brillante que su precedentes compañeras de viaje.
Es cierto que también pasaron por una época en la que sacaron redondos no muy emotivos y si me permitís, hasta algo aburridos pero en los últimos años esa fase por fortuna se está diluyendo por completo en el olvido y la banda se afana más por completar trabajos mucho más robustos, bien estructurados. Si uno echa un pequeño vistazo atrás se dará cuenta que desde "Ironbound" pasando por "The Electric Age" y su penúltimo "White Devil Armory" todo ha ido más acorde a las circunstancias exigidas a una banda del calibre como esta.
La escucha del álbum "The Grinding Wheel"se hace amena en todo momento, a ello ayuda dos factores fundamentales. El primero una gran producción y un sonido realmente espectacular en el que no se ha dejado nada al azar. En segundo lugar tenemos canciones que siguen la misma onda pero con variaciones muy bien introducidas en las que se alternan temas rápidos con otros más lentos ganando en algunos casos, una mayor riqueza musical.
La banda es puro fuego incontrolable y Bobby "Blitz" Ellsworth se tiene que sentir muy orgulloso del resultado obtenido, sobre todo de ofrecernos un muy buen disco de Thrash Metal como este de 2017; no dejes pasar la oportunidad de escucharlo una y otra vez. Por fortuna para todos tenemos Overkill para muchos años; recomendable a todos los efectos.
- Mean, Green, Killing Machine
- Goddamn Trouble
- Our Finest Hour
- Shine On
- The Long Road
- Let's All Go to Hades
- Come Heavy
- Red White and Blue
- The Wheel
- The Grinding Wheel
Bobby "Blitz" Ellsworth: Vocalista - D.D. Verni: Bajo - Dave Linsk: Guitarra - Derek "The Skull" Tailer: Guitarra - Ron Lipnicki: Batería.
Web Oficial:
OVERKILL
OVERKILL - Goddamn Trouble
