viernes, 15 de julio de 2016

IRON MAIDEN - Crónica Concierto Madrid 13-7-2016


IRON MAIDEN + THE RAVEN AGE
Madrid, Miércoles 13 de Julio de 2016
Barclaycard Center, Palacio de los Deportes

Espectacular evento de IRON MAIDEN el que se vivió en Madrid el pasado 13 de Julio de 2016 en el Barclaycard Center o Palacio de los Deportes, como se prefiera. Esta vez para presentar su último larga duración "The Book Of Souls" que tan buenas críticas en general está cosechando, había que comprobarlo en directo. En una jornada calurosa en la capital madrileña (cosa que por el norte de otras capitales no fue así) las expectativas para el concierto eran inmensas y eso se palpaba en el ambiente nada más llegar a las inmediaciones del concierto.


No se si Madrid estuvo plagado de camisetas negras, pero que la estampa Iron Maiden estuvo presente en casi todas ellas fue una realidad palmaria. Tanto en los conciertos de Madrid, como de
Sevilla el grupo encargado de telonear a la Doncella eran THE RAVEN AGE donde se encuentra precisamente el hijo de Steve Harris

La organización e instalaciones me parecieron de primera, bien dirigido y con el personal currando a tope encargándose de ir organizando a la gente dependiendo si lo que tenías era pista o grada. El hecho de que no te dejen entrar con muñequeras, etc… me pareció un tanto extraño, no termino de entenderlo por mucho que digan que es por temas de seguridad. Otra batalla que no tiene solución me da a mí es el precio de las bebidas, se exagera de un modo que resulta ofensivo para el público. Que te cobren 10€ por un Cachi de Cerveza por citar un ejemplo es una auténtica desvergüenza que no tiene nombre, en este concierto y en todos los festivales de hoy en día. La gente bastante esfuerzo económico hace para adquirir sus entradas como para pagar esas cantidades por su bebida favorita. Una vez más muy mal en ese aspecto, robo a mano armada.

En torno a las 19:50 de la tarde cuando la mayoría del personal estaba todavía fuera tomando un refrigerio o haciendo tiempo antes de Maiden, comenzaron a sonar las primeras notas del grupo telonero. ¿Qué queréis que os diga? THE RAVEN AGE me parecieron cutres, ni fu ni fa, ni blanco ni negro. Una banda con sonidos y ritmos fáciles más bien encauzada para gustos de un personal adolescente o muy aficionado al Groove Metal. 

El pabellón poco a poco comenzaba a llenarse de público y el bullicio iba in crescendo conforme pasaba el tiempo hasta que llegó un momento en que no cabía un alma más. Llegadas las 21:00 horas y con varios minutos de retraso comenzó a sonar "Doctor, Doctor" de UFO. Y digo retraso porque todas las veces que he visto a IRON MAIDEN fue al revés, primero Ufo y en punto clavadas la entrada de los británicos. Así que esta vez el Vídeo Intro que utilizaron en ambas pantallas hizo acto de presencia aproximadamente sobre las 21:08, IRON MAIDEN ya estaban aquí.

En el Vídeo pudimos ver una presentación con el Famoso Avión Ed Force One enredado en la maraña de la selva hasta que una mano de Eddie lo lanza con virulencia en unas imágenes que enlazan directamente con la temática del disco "The Book Of Souls".

Foto cortesía de Oscar Raúl Flores

Embozado en una sudadera pudimos ver directamente en la parte superior del escenario a Bruce Dickinson entonar las primeras frases del tema IF ETERNITY SHOULD FAIL. El grito ensordecedor de la peña ya se hizo instantáneo y cuando el resto del personal saltó al escenario la fiesta era ya total. Tengo que decir que al principio el sonido no me gustó nada porque entre otras cosas las guitarras apenas se percibían con claridad. El escenario de grandes dimensiones estaba muy bien estructurado y creo que de un mejor gusto que anteriores giras.

Las pantallas nos mostraban los movimientos de los músicos para una mejor percepción del público que no paró de corear el single SPEED OF LIGHT con ese estribillo clavado para el directo. A partir de aquí el sonido comenzó a mejorar de una forma progresiva y Bruce se dirigió al respetable para saludar mientras los vítores de la peña apenas le dejaban hablar por el micro. Tras ello atacaron con un clásico absoluto, CHILDREN OF THE DAMNED que terminó de volver loca a la gente con unas guitarras como la de Dave Murray que empezó a tener una mayor transparencia en el sonido.


De ahí pasaron a otro de los temas del nuevo disco TEARS OF A CLOWN que a mí personalmente no termina de convencerme ni en su versión de estudio, ni en directo. Bien ejecutada por los seis músicos desde luego. Hablando de éstos y llegados a este punto sí que puedo deciros que encontré a un Nicko clavando cada pieza musical pero muy cansado físicamente. Bruce moviéndose por el escenario y con una voz bastante mejor de lo que yo esperaba habiendo pasado por un cáncer de lengua del que se ha estado recuperando este año. Steve Harris en su línea dándolo todo aunque cada vez y como es lógico, cueste más. Janick Gers es la locomotora personificada imprimiendo esa rabia sobre el escenario (no para el tío) aunque su aportación musical es menor que la de sus dos compañeros de faena, sobre todo en los solos de guitarra. Dave Murray como siempre, ese hombre no cambia su sonrisa y buen hacer ni aunque le partan en dos, estuvo genial. Pero si para mí alguien fue merecedor de una mención a mayores, ese fue Adrian Smith. Técnica y calidad a partes iguales, matrícula de honor. Esta fue la tónica general a lo largo del concierto.

Foto cortesía de Oscar Raúl Flores

Con THE RED AND THE BLACK yo creo que nos quedamos casi todos afónicos coreando una de las composiciones más destacadas de su último disco y que en directo funciona a las mil maravillas. Y sí hacer fotos en pista es complicado… ni os cuento cuando el telón que marcaba el inicio de THE TROOPER se abrió ante nosotros. La peña se volvió loca (yo entre ellos, he de reconocerlo) con las primeras notas que nos transportaron a otra época, un clásico que no pudo faltar a su cita.

De pronto y casi cambiando de telón por tema apareció la pirámide Azteca y el sonido del antiguo Egipto se fundió en un solo choque de primigenias culturas para abrir POWERSLAVE. Cuando ví a Bruce Dickinson salir tras las llamas con una máscara del tipo lucha libre que utilizan en Méjico u otros países, se me cayó el alma a los pies jajajaja, cutre a más no poder. Menos mal que la música y un sonido muy mejorado complementaron una obra maestra de tal calibre. De ahí regresamos a dos temas de su último álbum, la enérgica DEATH OR GLORY y la que da nombre a su álbum THE BOOK OF SOULS sonando espectaculares las dos aunque me quedaría con la segunda. Eddie salió durante ésta a "saludar" al respetable y a danzar por el escenario.


El estruendo llegó mucho más inclusive con HALLOWED BE THY NAME, otro clásico que es necesario y pieza fundamental en sus conciertos. Bruce aunque no llegue a los altos de antaño hizo un papel muy bueno defendiéndose de maravilla y con una voz más que potente. Y clásico tras clásico apareció FEAR OF THE DARK… sin palabras. La unión entre el público y el grupo aquí era ya más que obvia. Llegados a este punto su himno IRON MAIDEN entró de lleno al grito de "Scream For Me Madrid" y con un EDDIE gigantesco que emergió de la parte posterior del escenario bajo un descomunal juego de luces como podréis imaginar.

Foto cortesía de Oscar Raúl Flores

Ya sólo nos quedaban los bises por disfrutar con un brutal THE NUMBER OF THE BEAST, el diablo enorme apostado en la parte derecha del escenario mientras las llamaradas se extendían sin cesar. Bruce se dirige al público para indicar que no importa de donde vengas o quién seas, todos somos hermanos de sangre, tal como se comenta en BLOOD BROTHERS de un ya lejano "Brave New World". El punto y final lo puso un clásico de los de órdago, el single WASTED YEARS en donde se produjo una anécdota curiosa cuando Bruce aparta el pie de micro para que no pueda cantar los estribillos Adrian Smith. Regresa y le sube en exceso el pie y a continuación lo bajaba casi hasta el suelo mientras Bruce no paraba de reírse… Adrian no se qué pensaría jajajaja.

Punto y final Damas y Caballeros, poco a poco las luces se apagaron y tuvimos que decir adiós cuando eran las 22:55 más o menos. Rozando las dos horas sin parar de cantar, saltar y sudar como pollos… no se los de las gradas como estaríais pero abajo se vibró con Maiden y mucho. 

Foto cortesía de Oscar Raúl Flores

15.000 almas afortunadas de presenciar un gran concierto en un marco incomparable y ojo, voy a decirlo muy claro… no fue el mejor evento que haya visto de IRON MAIDEN pero bastante mejor que en su gira del "The Final Frontier" eso también os lo garantizo; tanto a nivel musical, como de escenografía y elaboración del set list interpretado. 

Con respecto a los músicos y resumiendo: Bruce Dickinson cantando bastante mejor de lo que yo esperaba, Steve Harris en su línea, Janick Gers el huracán personificado aunque me gustaría que tuviera más peso en las canciones como guitarrista. Dave Murray excelente junto a un magistral Adrian Smith y Nicko McBrain muy bien pero algo machacado.

Profesionales como la copa de un pino, buen hacer y para todas las décadas que llevan en carretera un lujo fantástico poder comprobar como hay mecha al menos para unos pocos años más. Muchos son los que ya se aventuran a presagiar un final inmediato de IRON MAIDEN y más si cabe tras las declaraciones de hace tiempo de su batería Nicko McBrain en las que reflejaba su cansancio y que ésta posiblemente sería a nivel personal su última gira. Él mismo reiteró que de producirse este hecho Maiden seguirían con otro batería. Aventurarse a vaticinar este tipo de cuestiones es harto difícil, sólo el tiempo es capaz de discernir qué futuro espera a la Doncella de Hierro. Mientras tanto quedémonos con el recuerdo imborrable de este gran concierto y su último álbum "The Book Of Souls".

UP THE IRONS!!!