METAL TROOPER PALENCIA: UNISONIC - Unisonic (2012)

miércoles, 18 de abril de 2012

UNISONIC - Unisonic (2012) - Crítica

Unisonic - Unisonic

Alemania

EarMusic

Editado el 30 de Marzo de 2012

Estilo: Power Metal / Rock

Todos cuando oímos que dos de los grandes como Michael Kiske y Kai Hansen unían sus fuerzas para crear un proyecto en común llamado UNISONIC nos quedamos de palo. Tras varias décadas el sueño de muchos se hizo realidad y el recuerdo de mejores épocas con los adorados Helloween comenzó a repiquetear como el sonar de una campana.

¡Eh! ¿quién nos iba a decir que el renegado del metal de Kiske volvería a sus fueros iniciales?

Con un EP o maxi de adelanto dejaron bien claro en cierto modo por donde irían los tiros y la verdad que musicalmente a nadie le pillaría de sorpresa cuando oímos dicho avance. Haciendo click AQUÍ podéis leer la crítica o review aparecida en Metal Trooper Palencia.

Por mucho que se empeñe Kiske en sus declaraciones que Unisonic no es un enfrentamiento claro contra Helloween, no me lo creo para nada. Unisonic es la evolución que siempre deseó llevar a cabo en los “calabazas” y que nunca pudo poner en práctica si exceptuamos la porquería aquella del “Chamaleon”. Se quieren resarcir sin copiar los elementos que en el presente utilizan los Helloween pues la caña más metódica es algo que se ha descartado para Unisonic.

En este nuevo proyecto hay un mayor acuerdo tácito entre los dos líderes del grupo que nos han traído un gran trabajo pero algo más melódico de lo que esperaba en un principio. Los que esperen un discazo como los clásicos más auténticos de Helloween, aviso que se llevarán una desilusión. Ahora bien, también hay que aclarar que el combo Hansen – Kiske sigue siendo descomunal inclusive hoy en día.

Este primer compacto de título homónimo es un conglomerado de buenas canciones pero un tanto edulcoradas y pasadas por el tamiz del “supuesto enemigo” del Metal que sigue gozando de una voz privilegiada. Digamos que el redondo se inicia con un sabor clásico y potente que irá perdiendo paso a paso toda la frescura y brillantez de su exordio. No es que sean malas canciones pero se echa en falta un poco más de gancho para que el álbum pueda ser catalogado como una obra maestra.

No podía ser de otra manera, el cd se empieza con la propia UNISONIC que fue el referente fundamental del primer EP y del que grabaron un Vídeoclip a modo de presentación como single. No desarrollaré mucho la explicación de esta pedazo canción pues ya hablé de ella en la crítica del Ep antes mencionado.

Le sigue otra de las ya comentadas que se ha convertido en una de mis favoritas del disco, se trata de SOULS ALIVE que esta vez aparece en su versión disco ya que tuvimos la oportunidad de oírla en su vertiente Demo. Como ya dije es una composición algo más tranquila pero de una belleza apasionante, es otro single en potencia que demostrará el camino a seguir en un futuro no muy lejano por los alemanes.

De ahí pasamos a la rockera NEVER TOO LATE con una introducción en la que tanto guitarras como el magnífico bajo de Dennis Ward se irán fundiendo para que Michael Kiske recalque una vez más su calidad a la hora de adaptarse a todo tipo de temas. Estribillo de fácil ejecución y bastante “cantarín” que podrás memorizar sin ningún género de dudas. Una pieza más sencilla y edulcorada.

A pesar de que I’VE TRIED comienza a dejar reminiscencias de ritmos si te descuidas muy rockeros, destaca por su gran calidad artística y el mimo prestado a unas estrofas simples pero llamativas, con color. Ni que decir tiene que el estribillo es su peso fuerte y desde un principio se te quedará grabado por su carisma que se verá reforzado tras él por una fabulosa melodía de guitarra. Es un tema comercial a más no poder, pero tiene ese halo fantástico que Kiske añade a cada composición.

Estupenda melodía vocal la que entra de lleno en STAR RIDER con otra canción que deja entrever que las canciones más potentes han pasado para no volver. Eso sí, la majestuosidad de la estrofa con coros que responden al cantante hacen de ésta, otro pequeño tesoro a reseñar.

Con algunos reminiscencias a lo Helloween, las guitarras de NEVER CHANGE ME dan la sensación de una mayor viveza y el tema posee más cuerpo. Durante las estrofas el bajo será el protagonista más inmediato con un desarrollo más serio. Fantástico el solo de Kai Hansen que sin ser demasiado pretencioso, no carece de personalidad.

RENEGADE puede ser que te recuerde a pequeños fragmentos disueltos de gente como Masterplan aunque la calidad aquí es un grado más. De comienzo tranquilo y sosegado va ganando intensidad hasta llegar a un estribillo casi mágico, también con coros. Lo más destacable es el precioso solo de guitarras que Kai y Mandy nos regalan.

Tampoco me extenderé mucho en MY SANCTUARY pues ya apareció en su primer EP “Ignition” en su mismo formato.

Recuperamos algo más de enjundia con KING FOR A DAY con otra sobresaliente entrada de bajo por parte de Dennis Ward. Las guitarras y todo el peso de esta pieza hacen pensar en una mayor madurez y unos objetivos más serios que otros temas precedentes. La subida de ritmo es impresionante con unas guitarras mucho más Heavy y en una onda más a lo Helloween. De lo mejorcito del disco.

Da la sensación que han dejado los temas más rockeros para el final y así lo demuestra el preludio de WE RISE. Posee una evolución más conceptual con la obra anterior y durante el discurrir de las estrofas se desglosa una mayor inquietud por una especie de Hard bien llevado. Y tremendo el enfrentamiento guitarrero de Kai Hansen y Mandy Meyer, regalándonos un pasaje de bella factura a las seis cuerdas.

Terminamos con una balada y si he de ser sincero con vosotros, no la esperaba. Se trata de NO ONE EVER SEES ME que entre guitarras clásicas y acompañamiento orquestal, deja su impronta por el lado melódico que tanto le gusta a Kiske.

Insisto, de escucha obligada y un discazo para todos los seguidores del Power Metal que marca las diferencias entre músicos profesionales que llevan toda la vida en esto de la música. Es de rigor 1e dediques unas cuantas escuchas porque a veces captarás detalles escondidos que pasarán desapercibidos en las primeras entregas. No entra de buenas a primeras como pueda parecer.

Influencias de los años ochenta que regresan con piezas que mantienen las estructuras y las connotaciones de aquella década, pero a su vez, sonando con una perspectiva más hodierna. Los más seguidores de Helloween necesitarán algo más de caña, y la verdad es que se queda un poco “flojito” en ese aspecto. Sea como fuere, este disco no dejará indiferente a casi nadie y desde luego sigue siendo un placer para los oídos escuchar la voz de Michael Kiske. Una de las reuniones más esperadas en el mundo del Metal por fin se hizo realidad.

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