miércoles, 23 de noviembre de 2011

TRILLIUM - Alloy (2011) - Crítica


Trillium - Alloy
Estados Unidos
Frontiers Records
Editado el 1 de Noviembre de 2011
Estilo: Metal Sinfónico

     


Muchos cuando hayan leído el nombre de TRILLIUM habrán dudado sobre qué grupo estamos hablando, pero si os digo que se trata del proyecto en exclusiva de AMANDA SOMERVILLE la cosa os puede sonar algo más. Y si os comento además que forma parte del prestigioso elenco de artistas en AVANTASIA, todo habrá quedado más que clarificado.

Una de las vocalistas femeninas que más auge ha experimentado en estos últimos años se lanza en solitario con músicos tan increíbles como Sascha Paeth o gente que ha discurrido por las filas de Luca Turilli. La cantante que compartió proyecto también con el ex - Helloween Michael Kiske regresa al escenario musical con un disco de Metal Sinfónico, muy en la onda de los grupos con cantantes femeninas que tanto éxito están generando en el precedente lustro.

Varias perspectivas al respecto pues es un álbum de luces y sombras. Por fortuna y para suerte de todos hay más material de calidad del que se queda un tanto rancio. De sus cualidades como vocalista no las pondré en duda en ningún momento, posee un halo personal aunque a priori te parezca semejante a otros del estilo. El único problema que yo le veo a este “Alloy” es que va perdiendo fuelle conforme prosiguen los temas. La efectividad de las primeras canciones emociona por su sentimiento cautivador y algo oscuro si me lo permitís. Iremos bajando el listón poco a poco con canciones más bien rockeras o atmosféricas sin espíritu que variarán dependiendo del enfoque con la que la norteamericana ha querido dotarlas.

Como si de una película de terror se tratara, MACHINE GUN se abre paso con unas guitarras llenas de melodía que serán vigiladas bajo el sustrato de una especie de coro interpretado por la misma Amanda. En un tono muy flemático se desarrolla la estrofa que irá incrementando su intensidad al acercarse al estribillo, el cual se muestra simple pero efectivo y sin que el poder de la cantante resuene en todo su esplendor. Una canción efectiva para empezar el disco y que hace preveer un aura más umbrío que no llegará a consolidarse.

En COWARD también unos teclados interceden con unas notas muy en segundo plano que se dejan notar y evidencian un sentimiento de tristeza general. Las guitarras no es que destaquen sobre el resto con unos riffs muy simples cumplen su papel y punto, no pidas más. Llegamos a uno de los estribillos más notables de todo el compacto y de un sabor que puede ser sinónimo de bandas como Epica con una diafanidad que convence nada más escucharse. El progreso de las estrofas se vuelve más sinfónico y el poder vocal de Amanda es más palmario. Ojo al final porque será un claro indicativo de lo que podremos encontrar de aquí en adelante.

Algo más rockero es el exordio de PURGE que reitera en el esquema de los dos anteriores cortes, calma pasando a instantes más fulgentes con las guitarras tomando mayor protagonismo. La composición es de un toque más comercial y es la fórmula habitual que suelen utilizar los grupos de este palo. El tema tiene algo más de dinamismo y desemboca una vez más en un estribillo característico. Sonidos sintetizados también se dan cita aquí.

Gran comienzo melancólico el de UTTER DESCENSION con la voz de Amanda resonando con los teclados de fondo. La musicalidad de sus cuerdas vocales aquí será un referente. En el avance de las estrofas se denotan reminiscencias de cualquier grupo de Metal Sinfónico, convirtiéndose en una balada “típica”, esa es su única pega. El resto del tema está muy bien llevado y destaca el cambio de ritmo que supone un retoque de refresco para esta pieza. Solo de guitarra profundo, lleno de congoja y que pone a la cuarta pista como una de las más destacables del disco.

Reverberación en las guitarras para emprender BOW TO THE EGO que con el comienzo de su cadencia y los riffs de guitarra me ha venido a la cabeza a los holandeses Edenbridge. El doble bombo actúa con más presencia y una de las obras en donde el grupo experimenta más con la potencia sin renunciar a su esencia sinfónica.

MISTAKEN entra en unos vericuetos más facilotes pues emplea todas las armas comerciales que se puedan encontrar para convertirlo en un single de fácil digestión. La marcha del bajo junto a la batería resalta otra faceta más a explotar en las estrofas. Demasiado rebuscada y manida con un claro objetivo de encandilar a un público muy variado.

Teclados, piano y un violín nos llevan a otros derroteros antagónicos si lo comparamos con sus precedentes... ojo, sólo en el inicio. Os hablo de SCREAM IT que provoca un subidón descomunal en el concepto general del disco. Y es que tenemos a un invitado de excepción, el increíble vocalista Jorn Lande que participa con gran vehemencia en la que quizás sea la mejor canción de este redondo. Que fuerza aplica Jorn en mezcolanza con Amanda, es algo prodigioso. Todo el desarrollo musical está lleno de matices con las guitarras más conjuntadas y un teclado que recalca su labor sin llegar a ser empalagoso.

Melodía de guitarra a la hora de encetar JUSTIFIABLE CASUALTY tras otro comienzo relajado. Así será a lo largo del tema pues otra vez regresamos a canciones pausadas e impregnadas de la consabida melancolía. Los platos resuenan con gran brillantez y escuetas notas de teclado se cuelan en un aporte más cercano al territorio de las baladas. Preludio antes del solo muy atrayente con la voz de Amanda pasada por un filtro, incluido el solo que acelera todo el proceso del corte, ese será el punto culmen de la obra.

Extraña y experimental es PATH OF LEAST RESISTANCE con elementos innovadores que no cuadra mucho en el criterio del Cd pero por el contrario, contribuye a regenerar las líneas marcadas hasta ahora. Será durante el estribillo donde percibas más las características comunes del grupo y el tipo de música al que representan. Las guitarras quedan algo por debajo de lo esperado y sin apenas personalidad.

Llegamos a la única versión que podrás descubrir en los más de cincuenta minutos de este “Alloy”, INTO THE DISSONANCE. La original pertenece a la banda de Metal Gótico suiza LUNATICA y las diferencias entre ellas son más bien pocas. Se mantienen los elementos sintetizados en varios segmentos del tema, la tonalidad vocal es análoga y el único punto discordante radica en que el solo de guitarra de los suizos es mucho más enérgico que el de Trillium.

Hemos de acabar ya con SLOW IT DOWN, otra balada que rompe moldes por su gran tratamiento musical. Piano y voz meliflua en una de los mejores estribillos que he podido oír en Amanda. Se van sumando más singularidades como elementos orquestales, coros muy bien intercalados en una composición digna y que pone el broche de oro perfecto.



Compacto aconsejable para todos aquellos que gusten de voces femeninas en grupos no demasiado cañeros y que disfruten del Metal Sinfónico en su formato más simple. Un disco consuetudinario que no creo sorprenda en exceso al resto del personal.

Muy buen disco aunque de seguir la ruta marcada por este compacto, es posible que en un futuro próximo se vea en un callejón sin salida como tantos otros grupos que se repiten en este estilo masificado.

Un redondo en el que se dan cinta músicos de renombre y con el que Amanda Somerville continúa demostrando tener una capacidad vocal prodigiosa convirtiéndose en una alternativa más que digna a grupos como Nightwish, Lacuna Coil, Evanescence… y toda esa pléyade de bandas tan de boga en el siglo XXI.

Primer trabajo que no es para celebrar una fiesta por todo lo alto pero al menos mantiene un interés con despuntes bastante interesantes. Dale más de una oportunidad, no te entrará de buenas a primeras, estás avisado.


Listado de Temas:
  1. Machine Gun.
  2. Coward.
  3. Purge.
  4. Utter Descension.
  5. Bow To The Ego.
  6. Mistaken.
  7. Scream It.
  8. Justifiable Casualty.
  9. Path Of Least Resistance.
  10. Into The Dissonance.
  11. Slow It Down.
Formación:
Amanda Somerville: Vocal y Teclados - Olaf Reitmeier: Guitarras Acústicas - Michael "Miro" Rodenberg: Teclados - Robert Hunecke: Batería - Sascha Paeth: Guitarra y Bajo - Sander Gommans: Guitarra - Simon Oberender: Teclados.

Web Oficial:

TRILLIUM - Coward